viernes, 28 de febrero de 2014

no me digas que no...

Antes de empezar me gustaría pedirte una cosa muy importante... ¡NO pienses en una VACA VERDE!
Ahora..., ¿en qué estás pensando?... ¿Probablemente en una vaca verde?.  Imposible no ver la vaca verde, ¿¿verdad??
Esta técnica se conoce como psicología inversa y fue desarrollada por Viktor Frankl, que solía preguntar a sus pacientes más inestables o más problemáticos: “¿Por qué no se suicida usted?”. En ese momento las personas se lo imaginaban y encontraban una razón para no hacerlo, y a partir de esa razón empezaba a trabajar Frankl. 


Esta técnica pretende conseguir un cambio en la otra persona haciéndole creer que quieres que haga algo que en realidad no quieres. El éxito se encuentra en lo que se llama resistencia psicológica. Esta resistencia la definimos como la dificultad que tenemos para hacer algo a lo que nos obligan o que nos piden y sentimos que hacerlo afecta a nuestra libertad, capacidad de decisión o autonomía.
Como resultado a esta resistencia las personas tienden a hacer lo contrario a lo que se les dice, simplemente para demostrar que son libres para elegir, autónomos en la decisión y capaces de tomar su propio camino.
Por supuesto que es una técnica que no funciona siempre y que en el fondo es más o menos criticable por tratarse de una técnica de manipulación. Sin embargo hay mucha gente que la utiliza con niños y adultos y creo que puede ser útil y curioso conocer algunos ejemplos para saber cómo funciona.
Algunas personas simplemente no responden a ella. Y las personas que sí lo hacen son en su mayoría aquellas que odian que les digan qué hacer. Se preocupan más por la lucha de poder consigo mismos que en lo que les conviene hacer, como los hijos rebeldes.
En los niños podemos encontrar numerosos ejemplos como cuando no quieren comer "¿No lo quieres? Bueno, se lo come mamá entonces"... ¿y entonces qué pasa?... que los niños abren la boca casi inmediatamente.
Un buen ejemplo de la aplicación de la psicología inversa sería el siguiente: queremos que nuestro hijo/a pequeño/a lea y vea menos la televisión, podemos aplicar la psicología inversa, haciéndole creer que lo divertido es leer y que lo aburrido es ver la televisión: “si ves la televisión al menos una hora podrás leer dos páginas de este libro”. De esta forma, sólo le permitirás leer dos páginas de un cuento o libro si (y sólo si) está una hora delante de la televisión. El primer día pasará la hora y probablemente ni se acuerde del libro. Entonces vas y le dices “ya ha pasado la hora, ¡muy bien!, ya puedes leer dos páginas del libro… ¡pero sólo dos!”. El niño las leerá extrañado y, cuando las haya leído coges el libro y te lo llevas: “mañana, si ves una hora la televisión, podrás leer dos páginas más”.
Aquí tenéis un vídeo con un ejemplo muy sencillo de un padre utilizando la psicología inversa con su hijo...


Y tú… ¿has utilizado alguna vez la psicología inversa? 

miércoles, 26 de febrero de 2014

empatía... ¿sabes cómo se siente?

A todos nos pasa, unas veces más que otras y a unos más que otros... hay muchas ocasiones en las que no conseguimos que los demás sean capaces de comprender nuestros deseos, emociones o necesidades... y a todos nos gusta ser comprendidos. Cuando alguien es capaz de comprendernos y demostrarlo, está mostrando su capacidad de empatía.


La empatía en una habilidad muy importante en todas las relaciones de pareja para saber ponerse en el lugar del otro intentando sentir lo que siente y comprender así lo que le ocurre. Siempre que estamos ante un conflicto y nos enfadamos, la empatía es algo imprescindible para poder solucionarlo. Cuando no existe esta empatía entre los miembros de la pareja, a la larga suele conllevar a otros problemas como la frialdad, el distanciamiento y la falta de comunicación, aumentando el malestar y surgiendo nuevos conflictos. Y tenemos que tener muy claro que la falta de comunicación es el principio del fin de cualquier relación.

Sin duda que ser empático es mucho más difícil cuando existe tensión, pero es precisamente en esos momentos cuando es más necesario poner todo el esfuerzo y dedicación de ambos miembros de la pareja. Además de saber ponernos en el lugar de la otra persona y experimentar lo que siente, también tenemos que encontrar la manera de comunicarle que sabemos cómo se siente. Y es que de poco vale entender sus sentimientos si no somos capaces de transmitírselo adecuadamente. Para que haya una comunicación adecuada debe incluir la empatía, ya que ambas habilidades van de la mano. 

Pero cuidado... muchas veces la gente se considera empática cuando lo único que está haciendo es transmitir cómo se sentiría él mismo en esa situación. De esta manera, puede hacer sentir peor a la otra persona, le transmite incomprensión y falta de interés, de apoyo, aunque su intención sea demostrar empatía. Por lo tanto, ser empático no es ponernos en el lugar del otro como nosotros vemos o sentimos la situación, es ir más allá, es tener en cuenta las características de personalidad del otro, sus reacciones emocionales más habituales... es ver a través de la otra persona como es ella, no como eres tú. 

¿Y tú, sabes ser empático? ¿Te resulta fácil ponerte en los zapatos de otra persona?

martes, 25 de febrero de 2014

¿qué hago... si no sé qué hacer?

Hay muchas veces en las que estamos estancados, bloqueados y confusos. No es que no sepamos tomar decisiones o cómo hacer las cosas, ni es cuestión de miedos, si no que simplemente no sabemos qué hacer.


  • Alejémonos de donde estemos. Muchas veces la situación, el estrés y las presiones familiares y de los que nos rodean son demasiado fuertes como para pensar con claridad. Por más que lo intentamos, no podemos. Es normal, en esas situaciones es difícil escuchar lo que realmente queremos, por eso es importante que saquemos tiempo para nosotros (esa utopía para tanta gente).  Ahora es cuando más lo necesitamos, y no me refiero a diez minutos, sino a todo el tiempo que haga falta para pensar con claridad lejos de nuestro ambiente habitual. Así que vayámonos de vacaciones aunque sólo sea un par de días o, si no podemos, vayámonos a dar un paseo, un baño relajante, escuchemos música... Lo que necesitemos para dejar que los pensamientos salgan sin las presiones diarias.
  • Reconsideremos los valores y necesidades. Muchas veces la razón del estancamiento es que no somos conscientes de nuestros valores y necesidades, o que éstos han cambiado y lo que antes nos llenaba ya no lo hace. Cuando nuestra vida no se alinea con nuestros valores nos sentimos infelices y cuando nuestras necesidades no son cubiertas también. Por eso es importante que los conozcamos y es uno de lo que intento ejercitar con mis clientes. 
  • Definamos éxito. Otro paso fundamental, asegurarnos que vivimos nuestra vida según nuestras reglas, no según las reglas de otros. Es fácil creerse la idea de éxito que otras personas y medios nos enseñan, pero si no es lo que queremos seremos infelices. Es importante definir qué es el éxito para nosotros... en todos los ámbitos de nuestra vida. Normalmente el éxito se asocia con éxito profesional, y para algunas personas lo es, pero... ¿lo es para nosotros?
  • Elijamos lo que de verdad nos importa. Es algo que menciono mucho, saber priorizar, saber elegir lo que es realmente importante en nuestra vida y dedicar nuestro esfuerzo y nuestro tiempo a eso. También es muy importante aceptar que no tenemos que hacerlo y tenerlo todo a la vez. Examinemos nuestra lista de objetivos y decidamos cuáles queremos y cuáles pueden esperar un poco más. 
Puede que hayamos cumplido las metas y objetivos que teníamos o bien que nos hayamos acomodado a una situación y nos damos cuenta que ya no nos motiva y no sabemos qué camino seguir a continuación. También puede ser que tengamos que tomar una decisión personal o profesional importante, algo que marque nuestra trayectoria a partir de ahora y estemos totalmente bloqueados.

Esta situación es muy frecuente y frustrante, porque no hay nada peor que la incertidumbre; y, en general, se debe a que no tenemos claro lo que queremos. Sin embargo, la experiencia con mis clientes me dice que, en el fondo, sí que lo sabemos; sólo necesitamos escarbar un poco para sacarlo a la luz. pero... ¿cómo podemos hacerlo?.

Cuando tenemos claros nuestros valores, necesidades, prioridades y definición de éxito, las cosas se ven de otra forma, nos cuesta menos tomar decisiones, nos cuesta menos encontrar lo que queremos porque nos conocemos mejor, que es lo primordial para vivir la vida según nuestras reglas y para sentirnos satisfechos con lo que hacemos y con nuestras decisiones.

¿Qué es lo que necesitas averiguar tú?

lunes, 24 de febrero de 2014

adolescencia... ¿dónde está mi hijo/a?.

La adolescencia es un momento de la vida donde se sienten fuertes emociones y frecuentes enfrentamientos entre las generaciones jóvenes y la de los adultos.

Todo empieza con los cambios físicos a los diez u once años (aunque cada uno se desarrolla a un ritmo diferente) y debido a la velocidad de la transformación del cuerpo, muchos adolescentes están preocupados por su apariencia. 

Además del rápido desarrollo físico, se producen grandes cambios emocionales que aunque son positivos porque les hacen madurar y forman parte del proceso de desarrollo, a veces pueden ser confusos e incómodos para los adultos y para el propio adolescente.

Los adolescentes deben salir de sus casas y unirse a un grupo de iguales, y el grupo de amigos es lo más importante en este momento de la vida, y es el lugar donde ellos van a construir su nueva subjetividad. Y los padres no se hacen tan imprescindibles. Los jóvenes pasan mucho tiempo hablando por teléfono, con el ordenador, escuchando música o fuera de casa, lo que irrita a los padres y produce conflictos.

Los conflictos y discusiones, aunque frecuentes, no tienen que ver con la personalidad de los padres ni con el de ellos. No es que no nos aprecien o no nos quieran más, sino que está relacionado con la necesidad de los adolescentes de independizarse y madurar. Y a la vez que se esfuerzan por ser más independientes, intentan nuevos caminos; pero si se enfrentan con dificultades, suelen enfurecerse, estar mal humorados y perder la confianza en sí mismo.

¿Qué problemas podríamos decir que son los más frecuentes de los adolescentes?:

Problemas emocionales:
Qué adolescente no se ha sentido tan triste que ha llorado y deseado alejarse de todo y de todos; pensando que lo vida no merece la pena vivirla. Estos sentimientos pueden dar lugar a un estado depresivo que puede esconderse bajo excesos alimenticios, problemas para dormir y preocupaciones excesivas sobre su apariencia física. También pueden expresarse estos trastornos en forma de miedos o ataques de pánico. 

Problemas de conducta:
Por un lado los adolescentes desean que sus padres sean claros y les suministren límites precisos pero cuando lo hacen, ellos sienten que le quitan la libertad y no le permiten tomar sus propias decisiones. Se producen desacuerdos y muchas veces los padres pierden el control no sabiendo qué les está pasando a sus hijos, ni dónde están.
Por lo tanto, es importante que los padres pregunten y conozcan donde están sus hijos, con quién están y a dónde van... A muchos ésto le puede parecer imposible, pero no lo es... aunque hay que trabajarlo cuanto antes. 

Problemas escolares:
Muchas veces los adolescentes rechazan ir al colegio. Esto se puede expresar en forma de “dolores de cabeza” o “estómago”. Puede ser por la dificultad de integración al grupo de iguales o conflictos con algún alumno sintiéndose acosado por algún compañero. Y estas situaciones pueden hacer que ir al colegio se convierta en una experiencia solitaria y amenazadora.
Otros problemas pueden estar asociados a estados depresivos, ansiosos y a la falta de confianza en sí mismos para encarar los desafíos del aprendizaje escolar y el de hacerse de amigos.
Estos problemas emocionales afectan al rendimiento escolar, pues es difícil poder concentrarse en la tarea cuando se está preocupado por uno mismo, los problemas familiares o de amistades. 

Problemas sexuales:
A veces los adolescentes son tímidos y están preocupados por su físico y ésto lleva a que no hagan preguntas acerca del sexo a los adultos con los que se relacionan. Normalmente reciben información errónea de sus amigos y compañeros. 
Y por ello puede pasar que sus experiencias sexuales las realicen en situaciones de riesgo de embarazos no deseados o de posibles contagios de enfermedades de transmisión sexual. Por eso es tan importante que nos adelantemos a ellos y les vayamos dando información desde que son pequeños.  

Problemas de alimentación:
Pueden sufrir de anorexia o bulimia nerviosa. Con respecto a la primera enfermedad, el sujeto se niega a comer y se ve con sobrepeso aunque realmente esté muy delgado. Con respecto a la bulimia, pueden tener sobrepeso o no pero ellos canalizan sus problemas a través de la ingesta inadecuada de alimentos, esto los deprime y hace que deseen superar este estado de ánimo a través de la comida produciéndose un círculo vicioso difícil de controlar si no se los pone en tratamiento. Información sobre anorexia y bulimia aquí

Problemas con el uso de alcohol, drogas:
El alcohol es la droga que más problemas causa en los adolescentes. Los padres deben estar atentos a cualquier cambio repentino y grave de conducta de sus hijos. 


La mayoría de las dificultades en la adolescencia no son ni graves ni duraderas, pero el adolescente tiene que pasar por alguna de ellas para constituirse en un ser libre e independiente con un proyecto de vida. Y los padres cumplen un papel importante brindando una base segura a sus hijos, por mucho que éstos lo nieguen, y para ello tienen que ponerse de acuerdo entre sí y apoyarse el uno al otro. 

Los padres son los que mantienen a sus hijos, por eso ellos tienen que decidir cuáles son las reglas del juego aunque a veces puedan ser negociadas y acordadas entre padres e hijos. Dichas reglas deben ser razonables y serán menos restrictivas cuando el adolescente se haga más responsable.
Es importante mantener un diálogo fluido y permanente con los hijos y ésto les ayudará a que se sientan cómodos acudiendo a nuestro encuentro cuando lo necesiten. y para ello es preciso, tal y como digo en todas las charlas que doy, es que se sientan escuchados, no criticados y no avasallados.

Diálogo y escucha, son dos principios fundamentales para afrontar todos los cambios que se suceden en este maravilloso (y difícil) momento de la vida de nuestros hijos.

viernes, 21 de febrero de 2014

cáncer y psicología

Todos tenemos alguien en la familia o a algún conocido con esta enfermedad. Es verdad que hace unos años era un enfermedad mortal y hoy en día la mortalidad ha disminuido bastante, sin embargo debemos (o deberíamos) tener en cuenta algunas cosas a la hora de afrontar la llegada de un cáncer.

Cuando un paciente recibe la noticia de que le ha sido detectado un tumor muchas veces no sabe cómo enfrentarse a la situación, en otras ocasiones son los familiares los que no son capaces.

el paciente.
Es difícil dar consejos a una persona recién diagnosticada de cáncer, porque cada uno somos distintos, y no a todos nos ayuda lo mismo. Sin embargo, sí que se recomienda:
Pedir ayuda a un especialista.
Buscar apoyo en familiares y amigos.
* No temer a expresar lo que se siente.
* Ante preguntas de nivel médico, acudir directamente a su médico, que evitarán consultar en internet.
Intentar llevar una vida saludable.
Centrar la atención en cuidarse a sí mismo.
Permitirse los momentos de bajón y verlos como un  proceso normal.

Por desgracia, en algunas ocasiones la situación es muy difícil y el diagnóstico es el peor que cabría esperar y “se permitan llorar, expresar sus miedos y preocupaciones, que no están solos y que hay mucha gente dispuesta a ayudarles y acompañarles, que intenten marcarse objetivos a corto plazo, que se centren en el día a día, en el presente.

El ser humano tiene una capacidad muy alta de adaptación ante situaciones difíciles, y hay una parte muy importante de nuestra felicidad que depende no tanto de la situación que estamos viviendo, sino de cómo nos comportemos ante ella. Sé que no es fácil, pero aquí estamos los psicólogos para proporcionar herramientas para ayudarte a conseguirlo.

los familiares.
Los familiares y, en general, los seres queridos puede ayudar de muchas formas con pequeños gestos cada día como, por ejemplo, “escuchando, comprendiendo, resolviendo dudas, informando, no mintiendo, siendo cercanos, evitando los juicios morales, adaptándose al paciente, respetando la capacidad de decisión que tiene el paciente, acompañando. Con el simple hecho de estar ahí, de estar presentes, ya se hace mucho.

familias con hijos.
Además de los consejos apuntados anteriormente, en el terrible caso de que el paciente sea un hijo hay que evitar la sobreprotección, que no caigan en el silencio, y que cuenten con él para las decisiones. Es importante que diferencien 'ser enfermos' y 'estar enfermos'. La mayoría de los niños con cáncer dicen que no quieren ser distintos, que quieren hacer, en la medida de lo posible, lo mismo que cualquier chico de su edad.

Puede darse otro caso, que sea uno de los padres quien haya sido diagnosticado de un cáncer. En ese caso es muy importante ser sinceros, informar y transmitir la información adaptada a la edad del hijo. Es importante que el niño sepa que puede acudir a nosotros cuando tenga alguna pregunta, que se sienta cómodo que confíe en nosotros y tenga la seguridad de que le estamos diciendo la verdad. Se debe evitar, mentir u ocultar información y si el mismo paciente no es capaz de contarlo, que lo haga otro miembro de la familia.

Espero que os pueda ser de ayuda y muchas gracias por haber dedicado un rato a leerme. Y por favor, como siempre digo, compartid si creéis que esta información puede serle útil a otros.

jueves, 20 de febrero de 2014

el peligro de la ira

sentimos ira cuando algo se interpone entre nosotros y nuestros objetivos, o cuando consideramos que estamos ante una injusticia.
es importante comprender que todas las emociones son útiles y necesarias, y la ira no es una excepción... pero, ¿para qué nos sirve?. nos avisa de que algo debe cambiar y nos motiva a detener aquello que consideramos injusto o nos molesta, y ¿qué hace entonces nuestro cuerpo?... disminuye el miedo y nos aporta la energía necesaria para actuar.
¿cómo podemos entonces dominar nuestra ira?
cuando ya nos ha desbordado la situación y nos sentimos invadidos por la ira, poco podemos hacer. como mucho debemos evitar responder con la misma moneda, la violencia provoca más violencia y cierra las posibilidades de comunicación. una recomendación... en cuanto notemos las primeras señales de que vamos a perder el control, lo mejor es apartarnos de quien nos está irritando antes de hacer o decir algo de lo que luego nos podamos arrepentir. tampoco es conveniente darle vueltas y vueltas a lo que nos ha enfadado, ya que solo conseguiremos enfadarnos todavía más.
después de cada episodio de ira es útil hacerse las siguientes preguntas:
adoptar el punto de vista del otro hará que le comprendamos mejor y nos enfademos menos. también nos puede ayudar dejar de ver las relaciones humanas en términos de ganar/perder, puesto que, en la mayoría de las situaciones, o todos ganamos o perdemos todos.


la ira en sí no es un problema, pero mal gestionada puede ser peligrosa porque no nos deja pensar con claridad y hace que actuemos de manera hostil y agresiva.

lo mejor es prevenir, así que antes de perder los nervios es fundamental no dejar acumular lo que nos molesta, porque al final seremos como una olla exprés que termina por explotar... algo que nos ocurre muy a menudo.
además es muy importante descansar y comer bien ya que está demostrado que cuando tenemos sueño o estamos hambrientos es mucho más fácil que nos saquen de nuestras casillas.


* ¿estoy ante una situación injusta? si es así, busca cuando estés tranquilo, la manera de cambiar las cosas sin recurrir a la violencia.
* ¿algo o alguien me impide conseguir mis objetivos? en este caso planteate:
      - ¿son mis objetivos realistas?
      - ¿es realmente lo que quiero?
      - ¿tengo alguna manera alternativa de conseguirlos?

miércoles, 19 de febrero de 2014

cuidemos y mimemos nuestra relación de pareja

Aquí dejamos algunos apuntes y recomendaciones sobre la vida en pareja, sabiendo que nuestra relación nunca es igual y el grado de acercamiento que tengas con tu pareja pueda variar hora a hora, día a día y de temporada a temporada.
Sin duda todos sabéis estas recomendaciones y las veis lógicas, el problema es que no nos acodamos de hacerlas...
  • Aprende de tus experiencias. Date cuenta lo que funciona y lo que generalmente incita una reacción negativa de tu pareja. Haz lo que funciona y deja de hacer aquello que incomoda o molesta al otro.
  • Pídele a tu pareja lo que quieres.  A pesar de lo que pudieras creer, tu pareja no puede, ni debe saber lo que estás pensando.  Preguntar aumenta la probabilidad de obtener lo que deseas.  Debes ser muy específico.
  • Mantén los acuerdos que llegues a tener con tu pareja. Esto fomenta la confianza, lo cual es la base de todo lo que es importante en tu relación y en tu vida.
  • Reconoce tus errores, aún si no te gusta la forma en que tu pareja los aborda contigo. Es tentador tratar de defenderte al ser atacado por tu pareja, pero si lo haces, ambos perderéis.
  • Reíros juntos. Compartir chistes, películas o cualquier otra cosa que os haga sonreír y recordad aquellas experiencias graciosas que vivisteis juntos.
  • De vez en cuando haz una tarea que no se espera que hagas. Por ejemplo, sorprende a tu pareja para que el/ella no tenga que preparar la comida.
  • Habla sobre la película que quieres ver o el restaurante al que quieres ir antes de preguntarle a tu pareja qué prefiere. De esta manera evitas enfadarte porque tu pareja no te leyó la mente.
  • Pon atención a lo que le gusta a tu pareja y usa esa información a la hora de hacerle un regalo.
  • Asegúrate de escuchar a tu pareja aún cuando estén en desacuerdo para que, por lo menos, puedas entender sus deseos.  Entender la posición de tu pareja no significa que tienes que estar de acuerdo con ella.
  • Hablad por lo menos durante 10 minutos sobre vosotros, vuestros logros, vuestros sueños, esperanzas, miedos y dificultades. Estos temas importantes a veces se pierden entre los retos cotidianos de la vida.
  • Evita culpar a tu pareja por los problemas en tu relación.  Trata todos tus problemas como si ambos fuerais los culpables...  además, ambos lo sois.
  • Pilla a tu pareja haciendo algo bien y reconóceselo. Es fácil quejarse cuando las cosas no van bien y esperamos que las cosas siempre salgan bien, así que no lo reconocemos. Tu reconocimiento será muy bien recibido.
  • Dale a tu pareja el mejor regalo que el puedes dar.  Escúchalo(a) con toda tu atención.



Espero que os ayude y lo pongáis en práctica.

carlos callejón



Licenciado en Psicología en 1998 por la Universidad de Sevilla y cursos de Coaching por la Universidad de Cantabria, Málaga y Berkely-Los Angeles (EE.UU). Trabajo desde 1999 con casos de psicología de desarrollo personal (infantil y adultos), trastornos de aprendizaje, problemas de conducta y terapia de pareja, todo desde el ámbito cognitivo-conductual. Soy experto en Resolución de Conflictos y desde 2007 también trabajo como coach personal, profesional y coach deportivo. 


Con frecuencia doy conferencias, talleres y cursos sobre psicología (Normas y Límites, Comunicación, Tiempo Libre, Cómo Mejorar la Autoestima, Resolución de Conflictos...) y coaching (Emprender en la Cuerda Floja, Coaching: Estrés y Bienestar, Crecer en Época de Crisis, ReDescubrir la Felicidad, Superando Límites y Poniéndonos en Acción...).

Algunos de los sitios en donde he estado han sido: 
  • Rotary Club Montpellier (Vermont, EE.UU.)
  • Facultad de Psicología, Universidad de Sevilla.
  • Ayuntamiento de El Ejido (Almería)
  • Servicio Andaluz de Empleo (Roquetas de Mar)
  • Colegio Oficial de Fisioterapeutas de Andalucía.
  • Ayuntamiento de Dalías (Almería)
  • Andalucía Emprende, Fundación Pública Andaluza - Junta de Andalucía.
  • Andalucía Compromiso Digital.
  • Cruz Roja Española.
  • ADOSA: Desarrollo y Orientación Socio-Laboral, Ayto. de Almería.
  • Clínica Pediátrica Almerimar (Almerimar)
  • Eres Energía - Comercializadora Eléctrica, Almería.
  • DeCiDe: Asociación Socio Laboral (Sevilla)
  • CEIP Ramón y Cajal, El Ejido (Almería)
  • CEIP Miguel Servet, Balerma (Almería)
  • Aula Formación, El Ejido (Almería)
  • Citta Consultores, El Ejido (Almería)
  • ...

esa maravillosa zona de confort

qué a gusto estás en tu burbuja, ¿verdad? esa zona de confort segura, donde conoces cada lugar con los ojos cerrados y donde sólo tienes que dejarte llevar...  todo está más o menos bajo control y los imprevistos que pueden surgir ya sabes cómo manejarlos. tu plan de acción es automático y tu respuesta va siempre en la misma línea: NO HACER NADA DIFERENTE.
atrévete a abrir puertas y ventanas en esa burbuja, deja que entre aire nuevo y tu zona de confort sea más amplia y puedas crecer personalmente. así adquirirás nuevas habilidades y te sentirás más satisfecho. los resultados de tu forma de actuar serán diferentes, y posiblemente los resultados y tus sentimientos lo serán también. ¿no crees que merece la pena intentarlo?. es verdad que requiere un esfuerzo, que puedes obtener un resultado fallido pero por lo menos, rompes tu dinámica de siempre. te movilizas, actúas, pruebas alternativas distintas... y es más probable que los resultados también sean diferentes.

salir de tu zona de confort te hará sentirte incómodo porque no sabes cuál será el resultado, estás creando algo nuevo y desconocido para ti. estás rompiendo con lo conocido, con lo que te da seguridad y confianza, pero a la vez te ahoga y te encierra más... y ahí se encuentra el autoengaño: salir de esa zona de confort implicaría perder ese control, esa seguridad y "tranquilidad" que te aporta, asumir riesgos que te puedan llevar a no sentirte tan bien como esperabas. lo que es más difícil de ver, es precisamente todo lo positivo que obtienes, pues el hecho de probar ya es tener la oportunidad de encontrarte mejor y encontrar lo que buscabas.


si siempre actúas de la misma manera, dentro de unos límites conocidos y sin aportar novedad a tu vida, cada vez te sentirás más ahogado, más encarcelado, con menos posibilidad de crecer. tanto en el área personal, profesional, de pareja como sexual, es necesaria la creatividad y la imaginación para evolucionar, crecer y fortalecerte.


sin salir de la zona de confort, difícilmente se puede conseguir este objetivo. ¿estás dispuesto a salir de tu zona de confort? te aseguro que MERECE LA PENA.


y aquí te dejo un vídeo que habla sobre la zona de confort



anorexia, bulimia...

los trastornos alimentarios tienen un gran impacto en la sociedad actual, pueden llegar a ser muy graves y es muy importe su tratamiento. veremos dos de los tipos más importantes de trastornos alimentarios y cómo los factores que predisponen, desencadenan y mantienen la enfermedad, así como qué hacer ante un posible caso de trastorno de la conducta alimentaria.

pero… ¿qué son los trastornos alimentarios?
son trastornos psicológicos en los que el miedo a engordar y al rechazo de los demás, la alteración de la percepción del peso y la silueta y la opinión de los otros provocan alteraciones graves de la conducta alimentaria y de la vida afectiva.
los tipos más importantes por su prevalencia en la sociedad actual son la anorexia y la bulimia, aunque últimamente están tomando importancia el trastorno por atracón y la obesidad infantil.


ANOREXIA NERVIOSA
independientemente de los criterios médicos y psicológicos que se utilizan para diagnosticarla, me interesa que sepas y tengas en cuenta las características físicas y conductuales que presenta junto con la afectación generalizada de su salud. no conviene olvidar que las personas con esta enfermedad suelen negar su problema, por lo que se resisten a ser ayudadas y tratadas ya que, para ellas, la terapia es una manera de obligarles a comer y cebarlas, que es lo que más temen.
indicadores de la anorexia nerviosa
restricción alimentaria autoimpuesta. tienden a probar todas las dietas y productos dietéticos sin necesidad.
pérdida de peso y de la menstruación, enfermedades y debilidad.
preocupación excesiva por el peso (cuerpo, imagen, comida… se pesan y se miran al espejo excesivamente), distorsión de la imagen corporal y pánico a engordar.
riuales con la comida. cuentan calorías, cortan la comida en trozos pequeños, la desperdigan por el plato para dar la sensación de haber comido más de lo que lo han hecho, comen muy lento, etc.
hiperactividad. se mueven mucho ya que lo relacionan con la pérdida de calorías.
uso de laxantes o diuréticos.
atracones o vómitos ocasionales.
evitan comer en familia.
mentiras y manipulaciones.
negación de la enfermedad.
cambio de carácter (agresividad, tristeza, apatía, ansiedad…).
aislamiento social. en ocasiones se empieza al revés: las chicas salen mucho porque estar fuera de casa les facilita saltarse comidas y engañar a la familia, pero conforme se va instaurando la enfermedad y comienzan a sentirse peor con su cuerpo, comienzan a aislarse.
excesiva exigencia y perfeccionismo. suelen ser chicas muy ordenadas, que sacan excelentes notas y se exigen mucho a la hora de realizar cualquier actividad o emprender cualquier proyecto.
baja autoestima, alexitimia (incapacidad para identificar y expresar emociones y sentimientos propios), inseguridad, etc.
dependencia de los demás.

BULIMIA NERVIOSA

se caracteriza por un irresistible impulso por comer de manera incontrolada, compulsiva y rápida, grandes cantidades de alimentos ricos en calorías durante un periodo de tiempo que puede ir desde los pocos minutos a horas y durante los cuales la persona experimenta una pérdida de control sobre la conducta alimentaria (no pueden parar de comer).
esta ingesta desmesurada, junto al sentimiento de culpa y vergüenza, generan depresión y autodesprecio, originando todo ello el vómito reflejo o inducido para disimular el malestar físico y evitar la digestión de lo ingerido. cuando no consiguen el vómito usan laxantes o diuréticos,  o el riguroso ayuno posterior para controlar el peso por miedo a engordar.
algunos indicadores de la bulimia nerviosa:
comen de forma excesiva y compulsiva (atracones) y luego realizan conductas para compensarlo tales como vómitos, uso de laxantes, diuréticos, pastillas adelgazantes o dietas restrictivas.
preocupación constante y excesiva por el peso (cuerpo, imagen, etc.). pánico a engordar.
- sensación de pérdida de control con la comida.
ansiedad.
callosidades en los nudillos de las manos, especialmente en los dedos índice y medio fruto del abuso del vómito.
problemas dentales.
menstruación irregular.
estreñimiento.
oscilaciones de peso.
evita comer en público o come a escondidas.
desaparece comida de casa.
tras las comidas va al WC con urgencia.
mentiras y manipulaciones.
cambios de carácter (agresividad, irritabilidad, depresión, desmotivación, etc.), inestabilidad emocional, baja tolerancia a la frustración.
desorganización de la propia vida, compulsión por las compras, cleptomanía, predisposición al consumo de tóxicos, etc.
agresividad y autoagresividad. amenazas e intentos de suicidio.
dificultad en la aceptación de límites familiares.
relaciones de dependencia e inestables.

FACTORES DE PROTECCIÓN ANTE TRASTORNOS ALIMENTARIOS

nos encontramos inmersos en una sociedad de consumo, superficial, competitiva y muy exigente con lo que se ha establecido como “imagen ideal”. además, el ambiente familiar en el que ambos progenitores se ven en la necesidad de trabajar fuera, deja al niño/a con muchas carencias emocionales y afectivas que le hacen ser más débil ante todo ese bombardeo de información que le llega de fuera.
es por ello que debes intentar fomentar los siguientes factores en tu entorno familiar para que tus hijos/as tengan herramientas que les sirvan de apoyo y no estén tan desprotegidos ante los mensajes e influencias externas negativas.
- hábitos alimentarios sanos.
- atividad física adecuada.
- aceptación y valoración personal.
- comprensión y expresión adecuada de lo que siente.
- responsabilidad en su escala de valores.
- capacidad para divertirse de manera creativa.

SEÑALES DE ALERTA.

los niños/as pasan muchas horas en el colegio y es también ahí donde pondrán indicarnos la existencia o riesgo de aparición de un trastorno de la conducta alimentaria. si tienes sospechas de que tu hijo/a puede estar padeciendo un trastorno alimentario, no estaría de más hablar con sus profesores para ver si han detectado alguna señal.

¿qué hacer ante un posible caso de trastorno de la conducta alimentaria?

1) observar todos los signos y factores mencionados anteriormente.
2) recoger toda la información posible de los compañeros de su entorno más cercano.
3) habla directamente con ella generando un ambiente de confianza. no la culpabilices.
4) no te centres en la comida y en el peso, en vez de eso, haz hincapié en su sufrimiento psicológico.
5) dirígete a un servicio especializado.

¿QUÉ EVITAR?

- negar el problema o restarle importancia.
- engañar a la persona para ganarte su confianza.
- poner el acento solo en el peso o en la comida.
- evitar actitudes paternalistas o broncas.
- acciones terapéuticas insuficientes o parciales (poner una dieta, dar medicación sin otras actuaciones, tratar un síntoma aislado, etc.)


espero que esta entrada pueda seros útil y si creéis que puede serle útil a alguien, no dudéis en compartirla.

martes, 18 de febrero de 2014

normas, límites, premios y castigos

empiezo este blog con una de las charlas que suelen tener más aceptación por parte de los padres, seguramente porque es sobre problemas con los que que todos los que somos padres nos hemos encontrado en mayo o menor medida. está esquematizada, ya que lo único que pretendo es que les sirva de recordatorio a los padres que han asistido a estas charlas.
NORMAS Y LÍMITES.
las normas y límites son la referencia que dan apoyo y seguridad a los niños.
desde que los niños son muy pequeños hay que establecer hábitos y rutinas, junto con límites y normas que deben ir “evolucionando” con el niño.
los límites y normas a veces serán más rígidas, a veces más flexibles.
ambos padres tenéis que ir juntos, para que vuestros hijos avancen adecuadamente. es decir: mismas normas, no contradicciones.
desde muy pequeños, hay que establecer hábitos y rutinas, junto con límites y normas que deben ir “evolucionando” con el niño.

igual que nos ocurre a nosotros, al niño le resulta más fácil seguir el camino correcto (portarse bien) si hay límites claros y si tiene incentivos que le animen a hacerlo y cuando el niño se sale del camino (se porta mal), aunque no lo manifieste abiertamente, se siente mal y su autoestima se deteriora.

los niños necesitan tener puntos de referencia (límites) claros sobre lo que debe o no hacer y tener esos límites claros es importante por tres motivos:
1) porque le ayuda a sentirse seguro.
2) porque le ayuda a entender e integrar las normas que rigen el mundo en el que vive.
3) porque le ayuda a “portarse bien”, a ser “mejor persona” y, por tanto, a tener buen concepto de sí mismo.

algunas ideas...

1. cuando algo nos agrada y nos elogian por ello, tendemos a repetirlo.
2. los padres sólo inspiran confianza cuando están totalmente convencidos de lo que exigen a sus hijos y mantienen sus ideas.
3. es mejor proponer sólo unas pocas normas, claras, precisas y concisas y de fácil ejecución.
4. no hay que perder la flexibilidad: es importante repasar de forma constante la validez de los límites y de las normas impuestas.
5. los límites y las normas deben ser respetados. no olvidemos que los niños nos ponen constantemente a prueba.
6. se aprende mediante modelos de comportamiento. no es creíble aquello que no es capaz de hacer el adulto.

ofrecer opciones

• cuando damos a elegir no estamos dando órdenes
• sienten que están participando, por lo que se implicarán más.

desaprobar la conducta NO al niño

• eres tonto/a →  no hagas tonterías
• eres inútil →  esta vez no te ha salido bien, ¡¡vamos a intentarlo otra vez!!
• si lo haces no te querré →  si haces esto no me siento bien

ser firme

• ser consistente empezando por mantener la rutina y los horarios.
• ser consistentes ambos padres.
• intentar que los niños colaboren en el establecimiento de límites.



PREMIOS...

todo acontecimiento que, seguido a una conducta, aumenta la probabilidad de que esa conducta se repita en el futuro.
¿¿¿son un chantaje???
el truco reside en ajustar el premio al esfuerzo y el procedimiento de darlo

TIPOS DE PREMIOS

- refuerzos materiales → comestibles - juegos o juguetes - fichas o pegatinas
- refuerzos sociales →
* atención de los padres
positivas: besos, abrazos, reconocimiento público, guiño, aprobación.
negativas: castigos, regañinas acompañadas de atención (el niño, a veces, sólo consigue la atención de sus padres así).
* aprobación de los demás: aplauso de la clase, comentario positivo del profesor/a, etc.

¿CÓMO APLICAMOS LOS PREMIOS?

* los premios deben ser algo deseado por el niño
* si el premio es a medio plazo, es más útil y efectivo premiar el proceso.
* cuanto más pequeño es el niño, más inmediato debe ser el premio.
* es preferible utilizar los refuerzos sociales más que los materiales.
* al principio: premios con poco esfuerzo para que el niño gane confianza. posteriormente pedirle más esfuerzo por el mismo premio.
* cada conducta que deseamos cambiar debe tener un premio independiente.
* prestar atención al niño cuando hace conductas positivas e ignorar (en lo posible) las negativas.
* debemos tener mucho cuidado y observarnos cuándo prestamos atención al niño porque, sin pretenderlo, podemos estar reforzando una conducta negativa

CASTIGOS...

toda experiencia que, seguido a una conducta, hace que disminuya la probabilidad de que la conducta se repita en el futuro.
una señal para que el niño se dé cuenta que ha franqueado un límite impuesto

TIPOS DE CASTIGOS...

físico: dar en el culo o la mano, sentar en una silla, poner de cara a la pared.
actividad desagradable: limpiar lo manchado, recoger lo tirado, etc.
suprimir una actividad agradable: dejar sin recreo, anular una fiesta o excursión, quitar puntos o pegatinas,...
social: reprimenda, ridiculizar delante de otros, insultar, mostrar el error para que todo el mundo lo vea, colocar a niños en el pelotón de los torpes.
tiempo fuera de refuerzo positivo: aislar al niño de lo que le resulta gratificante (rincón de pensar, mandarlo a su dormitorio, etc.).

¿cómo aplicar los castigos?

1) tienen que cumplirse
2) sistemáticos
3) los castigos ayudan a mantener las conductas ya adquiridas, los premios a instaurar conductas nuevas.
4) combinar premios y castigos.
5) las modificaciones que se producen utilizando el castigo sólo se mantienen mientras está presente la persona que impone el castigo.

EL CASTIGO EFICAZ...

ES INMEDIATO. no sirve si se aplaza.
ES INTENSO PERO BREVE. cuando se grita constantemente, no sirve de nada.
SE RECIBE SIEMPRE QUE SE COMETE LA FALTA. coherencia,
EL NIÑO SABE EXACTAMENTE POR QUÉ LE CASTIGAN. necesita reflexionar sobre sus conductas.

¿en qué momento haremos cada cosa?

castigo:
* conductas muy negativas y poco frecuentes (por ejemplo tirar un vaso con agua al suelo de forma intencionada).
* por incumplir con una buena conducta que estaba establecida y no requiere esfuerzo mantener.
 - premio
* conductas que requieren esfuerzo.

y todo se resume en...

sé que puedes.
por eso te enseño y te exijo.
y como sé que te cuesta esfuerzo, te lo reconozco.